Como en otras ocasiones acudimos a realizar labores de fotografía musical en Madrid. Las fotos en este caso eran para la revista musical Muzikalia. Se trataba del fin de gira del grupo Perro, de Murcia. Un cuarteto de chavales que ya llevan tiempo en el candelero de la escena “independiente”. Han tocado en festivales como el Sonorama y tienen una buena legión de seguidores que se vuelven majaras con sus canciones rápidas, adictivas y con letras divertidas e irreverentes.
En todos los conciertos de Perro hay que estar atentos para sacar la foto de sus locuras.
Casi en la mitad del show llevan dos baterías increíblemente sincronizadas.
Se cambian los instrumentos constantemente a lo largo de todo el concierto.
La Sala Joy Eslava suele ser de las mejores para la Fotografía musical en Madrid, pero en ocasiones (no sabemos si por el mandato del propio artista) esta es insuficiente y entre “tinieblas”, lo que te obliga tratar de sacar partido a una iluminación “rara”.
"Stage Diving" por parte de los integrantes de Perro.
Lo dicho, una iluminación un poco extraña para lo es esta sala, pero se saca partido a veces de las situaciones difíciles en la Fotografía musical.
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